No queda nadaya,
ni respeto,
ni valores
morales,
ni nada
-dicen-,
esto es
el acabose,
esta sociedad
está en estado
terminal
-apostrofran-;
y siguen
invirtiendo
en bolsa.
Esto es el acabose. Karmelo C. Iribarren
Desde la revolución industrial hasta aquí el modelo de producción, aunque enfocado a nuevos productos y mercados, no ha cambiado sustancialmente su estructura. Entre las empresas se suscita la competencia por los mercados; para conquistar los mercados, es necesario abaratar la producción; para abaratar la producción, lo más ventajoso es pagar salarios bajos, lo que no es difícil, ya que desde que existen las máquinas, sobra mano de obra.